miércoles, 5 de marzo de 2014

Balearon la casa de Héctor Gómez

Nuevamente balearon la casa del Presidente del Club Atlético Chaco For Ever, y no es nada común que por tercera vez ataquen al casa del Presidente, pero, el bandalismo sigue en cuestión en un grande que pasa en el mejor momento institucional, los resultados del fútbol no acompañan pero la pregunta siempre es la misma, porque suceden estas cosas?




No es la primera vez, ya pasó dos veces anteriores. Una incluso el mismo día que Chaco For Ever inauguraba las obras del Centenario,  mientras los socios festejaban los 100 años, dos individuos en una moto dispararon contra el domicilio del presidente Héctor Gómez. Este martes cerca de las 20 horas, con el mismo modus operandi, individuos balearon la puerta del titular albinegro y huyeron en motocicleta. El temor se apoderó de la familia que en ese momento se encontraba en el domicilio y que por suerte nadie que terminó lastimado. Cabe destacar que Gómez ya anunció que se irá del club en junio, cansado justamente por estas situaciones que intimidan a su familia y que son insostenibles. En esta oportunidad, los implicados en este hecho serían de un grupo de la barra brava, que molestos porque no puede ingresar a los partidos de local tomaron esta actitud. Pero la determinación de jugar solo con socios fue tomada por el COPROSEDE, que hasta el momento ha mostrado poca seriedad debido a que nunca salió a comunicar oficialmente la determinación y mucho menos salió a repudiar esta clase de atentados contra la propiedad privada de dirigentes que están expuestos diariamente.
Estos delincuentes ya han lastimado mucho a la institución, son los mismos que provocan suspensiones arrojando bombas al campo de juego, los mismos que perjudican al equipo que dicen amar y que sólo tiran por tierra el trabajo y el esfuerzo de dirigentes y jugadores. Lo concreto es que deben participar todos los sectores, el estado respaldando con seguridad, la justicia condenando a los violentos y la sociedad deportiva no mirando para otro lado sino repudiando para erradicarlos y aislarlos de los espectáculos deportivos, lugar que no merecen estar.

CRÓNICA DEL AGUANTE DEPORTIVO.