Un Boca Unidos de oferta, que dio
toda clase de ventajas en la marca durante casi 50 minutos, cayó ayer
categóricamente ante Guillermo Brown de Puerto Madryn por 6 a 3, en un
encuentro disputado en cancha de Huracán Corrientes, por la trigésimo
quinta fecha del torneo de fútbol de la Primera B Nacional.
El resultado dejó casi sin chances al equipo correntino por la disputa de un puesto para la Promoción por el ascenso, ya que ahora quedó a 9 puntos de Quilmes, cuando restan precisamente la misma cantidad de unidades en juego de aquí al final del certamen.
Esta era la oportunidad de achicar distancias. El sábado en el “Centenario”, el equipo “cervecero” había igualado ante Atlanta, y Boca Unidos ganando quedaba a 6 puntos, faltando tres fechas para concluir el torneo. Difícil, pero no imposible. Motivación suficiente para salir a buscar el triunfo desde el comienzo.
A los 12 segundos, Visconti remató de zurda desviado, ingresando al área, tras una buena circulación de pelota. El comienzo del local invitaba a ilusionarse con otro triunfo en Corrientes. Pero, cual espejismo, el juego de Boca Unidos comenzó a desdibujarse rápidamente. Bastó que el equipo de Puerto Madryn se asiente en el campo de juego para pasar de la euforia al sufrimiento.
El “aurirrojo” se equivocó seguido en la elaboración de las jugadas, y el “franjeado” demostró que es un equipo de temer con espacios y con la marca flotando, a un par de metros de distancia, como lo hizo ayer en toda la primera mitad Boca Unidos.
La visita eligió atacar por el sector izquierdo, donde Benítez le ganó el duelo a Ríos. Sin embargo, la apertura del marcador no fue por un acierto del rival. Un corner de Brown superó a todos, sorprendiendo a Baroni, a quien le rebotó la pelota en el pie izquierdo, con tanta mala fortuna que el balón se metió abajo, contra el palo derecho de Sessa.
El equipo correntino contestó con un remate bajo de Ríos, que Pereyra atajó en dos tiempos, luego de un centro de Gómez, que Núñez dejó pasar para el ingreso del extremo derecho.
Boca Unidos siguió yendo en busca de la igualdad, pero sólo tuvo claridad cuando la pelota pasó por los pies de Núñez, ante un equipo que se paró de mitad de cancha hacia atrás. Por momentos, la subida desde el fondo del local se tornó lenta y exasperante, con toques cortos e intrascendentes. En una de las salidas, Gómez la perdió en el medio. La pelota derivó en Diego Giménez, que le puso un pase milimétrico a Klusener, quien dejó atrás en velocidad a Moisés, para definir con gran categoría, picándola por encima de Sessa para establecer el segundo tanto.
Una sola vez más llegó Boca Unidos en la primera mitad. Una buena circulación entre Retamar, Núñez y Pérez, derivó en la habilitación por izquierda a Gómez, quien tardó un segundo en acomodarse, permitiendo que García tapara el remate.
El conjunto correntino estaba en plena búsqueda, cuando un rechazo largo encontró a Diego Giménez increíblemente solo en tres cuartos de cancha. El delantero vio adelantado a Sessa, y con una espectacular “vaselina” la colocó en el ángulo superior derecho. Golazo y 0-3.
El fondo del “aurirrojo” era una invitación a ingresar. Por poco Diego Giménez se pierde el cuarto tras una pared con Klusener. Sin embargo, el goleador de ayer tuvo su revancha antes del final de la etapa, cuando volvió a recibir solo, esta vez en el área, y con remate al segundo palo dejó sin reacción a Sessa.
Boca Unidos se fue a los vestuarios con cuatro cachetazos que lo dejaron “groggy”. Para colmo, apenas se jugaban dos minutos, cuando una contra letal encabezada por Bottino, derivó en un centro pasado que Fabián Giménez capturó para empujarla a la red. Tras cartón, Diego Giménez estableció el sexto, después de recibir libre de marcas y vencer la resistencia de Sessa con un remate bajo. El 0-6 lucía en ese momento lapidario, inalcanzable.
De a poco, el cambio posicional introducido por Ortíz comenzó a rendir sus frutos. Retamar se hundió en la defensa y Sánchez Paredes tomó su lugar en el medio. El equipo adquirió solidez en defensa, y Tempesta ayudó con la salida de Diego Giménez, ya que Zanni se estacionó por derecha y fue bien tomado. Esto, sumado a que Brown levantó el pie del acelerador, hizo que Boca Unidos se animara.
Pero no fue con fútbol que el equipo correntino comenzó a complicar al fondo sureño, lo hizo a través de una gran cantidad de pelotas aéreas que cayeron, casi como único recurso, al área visitante. En una de ellas, Visconti anticipó a Stang, peinándola para la entrada de Núñez, que definió por encima del arquero, para establecer el gol del honor.
A los pocos minutos, Visconti volvió a ganar arriba, la pelota derivó en Ríos, que la metió hacia el medio, y Núñez de cabeza puso el segundo. Entusiasmado, el local siguió insistiendo con la misma fórmula, y ganando en el área visitante. Se lo perdieron Visconti y luego González, que adelantado, levantó el remate en las puertas del área tras una asistencia de Núñez. El tercero llegó a poco del final, cuando el “Negro” metió un taco tremendo para que Visconti de zurda, y en posición dudosa, la cruzara al palo más lejano de Pereyra para establecer el tercero.
No hubo tiempo para más. Boca Unidos regaló casi 50 minutos, reaccionando demasiado tarde para intentar la heroica pero, sobre todo, dejando escapar la oportunidad de acortar distancias con Quilmes, y por lo tanto, de luchar por un lugar en la Promoción por el ascenso. El nivel del equipo en los dos últimos juegos preocupa, sobre todo teniendo en cuenta que todavía restan tres fechas para el final, y que en la próxima visita a River en el Monumental.
El resultado dejó casi sin chances al equipo correntino por la disputa de un puesto para la Promoción por el ascenso, ya que ahora quedó a 9 puntos de Quilmes, cuando restan precisamente la misma cantidad de unidades en juego de aquí al final del certamen.
Esta era la oportunidad de achicar distancias. El sábado en el “Centenario”, el equipo “cervecero” había igualado ante Atlanta, y Boca Unidos ganando quedaba a 6 puntos, faltando tres fechas para concluir el torneo. Difícil, pero no imposible. Motivación suficiente para salir a buscar el triunfo desde el comienzo.
A los 12 segundos, Visconti remató de zurda desviado, ingresando al área, tras una buena circulación de pelota. El comienzo del local invitaba a ilusionarse con otro triunfo en Corrientes. Pero, cual espejismo, el juego de Boca Unidos comenzó a desdibujarse rápidamente. Bastó que el equipo de Puerto Madryn se asiente en el campo de juego para pasar de la euforia al sufrimiento.
El “aurirrojo” se equivocó seguido en la elaboración de las jugadas, y el “franjeado” demostró que es un equipo de temer con espacios y con la marca flotando, a un par de metros de distancia, como lo hizo ayer en toda la primera mitad Boca Unidos.
La visita eligió atacar por el sector izquierdo, donde Benítez le ganó el duelo a Ríos. Sin embargo, la apertura del marcador no fue por un acierto del rival. Un corner de Brown superó a todos, sorprendiendo a Baroni, a quien le rebotó la pelota en el pie izquierdo, con tanta mala fortuna que el balón se metió abajo, contra el palo derecho de Sessa.
El equipo correntino contestó con un remate bajo de Ríos, que Pereyra atajó en dos tiempos, luego de un centro de Gómez, que Núñez dejó pasar para el ingreso del extremo derecho.
Boca Unidos siguió yendo en busca de la igualdad, pero sólo tuvo claridad cuando la pelota pasó por los pies de Núñez, ante un equipo que se paró de mitad de cancha hacia atrás. Por momentos, la subida desde el fondo del local se tornó lenta y exasperante, con toques cortos e intrascendentes. En una de las salidas, Gómez la perdió en el medio. La pelota derivó en Diego Giménez, que le puso un pase milimétrico a Klusener, quien dejó atrás en velocidad a Moisés, para definir con gran categoría, picándola por encima de Sessa para establecer el segundo tanto.
Una sola vez más llegó Boca Unidos en la primera mitad. Una buena circulación entre Retamar, Núñez y Pérez, derivó en la habilitación por izquierda a Gómez, quien tardó un segundo en acomodarse, permitiendo que García tapara el remate.
El conjunto correntino estaba en plena búsqueda, cuando un rechazo largo encontró a Diego Giménez increíblemente solo en tres cuartos de cancha. El delantero vio adelantado a Sessa, y con una espectacular “vaselina” la colocó en el ángulo superior derecho. Golazo y 0-3.
El fondo del “aurirrojo” era una invitación a ingresar. Por poco Diego Giménez se pierde el cuarto tras una pared con Klusener. Sin embargo, el goleador de ayer tuvo su revancha antes del final de la etapa, cuando volvió a recibir solo, esta vez en el área, y con remate al segundo palo dejó sin reacción a Sessa.
Boca Unidos se fue a los vestuarios con cuatro cachetazos que lo dejaron “groggy”. Para colmo, apenas se jugaban dos minutos, cuando una contra letal encabezada por Bottino, derivó en un centro pasado que Fabián Giménez capturó para empujarla a la red. Tras cartón, Diego Giménez estableció el sexto, después de recibir libre de marcas y vencer la resistencia de Sessa con un remate bajo. El 0-6 lucía en ese momento lapidario, inalcanzable.
De a poco, el cambio posicional introducido por Ortíz comenzó a rendir sus frutos. Retamar se hundió en la defensa y Sánchez Paredes tomó su lugar en el medio. El equipo adquirió solidez en defensa, y Tempesta ayudó con la salida de Diego Giménez, ya que Zanni se estacionó por derecha y fue bien tomado. Esto, sumado a que Brown levantó el pie del acelerador, hizo que Boca Unidos se animara.
Pero no fue con fútbol que el equipo correntino comenzó a complicar al fondo sureño, lo hizo a través de una gran cantidad de pelotas aéreas que cayeron, casi como único recurso, al área visitante. En una de ellas, Visconti anticipó a Stang, peinándola para la entrada de Núñez, que definió por encima del arquero, para establecer el gol del honor.
A los pocos minutos, Visconti volvió a ganar arriba, la pelota derivó en Ríos, que la metió hacia el medio, y Núñez de cabeza puso el segundo. Entusiasmado, el local siguió insistiendo con la misma fórmula, y ganando en el área visitante. Se lo perdieron Visconti y luego González, que adelantado, levantó el remate en las puertas del área tras una asistencia de Núñez. El tercero llegó a poco del final, cuando el “Negro” metió un taco tremendo para que Visconti de zurda, y en posición dudosa, la cruzara al palo más lejano de Pereyra para establecer el tercero.
No hubo tiempo para más. Boca Unidos regaló casi 50 minutos, reaccionando demasiado tarde para intentar la heroica pero, sobre todo, dejando escapar la oportunidad de acortar distancias con Quilmes, y por lo tanto, de luchar por un lugar en la Promoción por el ascenso. El nivel del equipo en los dos últimos juegos preocupa, sobre todo teniendo en cuenta que todavía restan tres fechas para el final, y que en la próxima visita a River en el Monumental.
